lunes, 25 de octubre de 2010
Un viaja Astral
Pero el viaje astral o proyección astral, también puede realizarse de forma consciente y controlada, a este respecto, existen personas que incluso lo llegan a experimentar de forma espontánea, estando incluso completamente despiertas y sin que exista un deseo expreso de realizarlo. Paradojicamente, existen personas que pese a proponerselo e intentarlo por diversos medios, lo único que consiguen es realizar una “proyección mental”, algo que no debemos confundir con el viaje astral, ya que mientras que el viaje astral es libre, es decir, no existe ningún control mental donde la mente o cuerpo mental pueda tomar ninguna iniciativa, la proyección mental es inducida o provocada, dirigida hacia objetivos bien claros y definidos, algo que en principio, quedaba reservado a maestros espirituales, yoguis, misticos y chamanes.
Cuando se produce una proyección mental, el cuerpo astral es dirigido hacia lugares muy especificos de la simbologia humana, donde los miedos, prejuicios, preceptos religiosos y todo aquello que la mente humana tiene asumido como conceptos morales, adquieren un significado que puede condicionar la existencia física del individuo, ya que el cuerpo o estado mental permanecerá siempre junto al cuerpo físico, por lo que en la proyeccion mental, el cuerpo físico quedará a merced de los deseos del estado mental.
Esta caracteristica de la proyección mental, es la que hace que sea utilizada junto con el viaje astral, por los chamanes y personajes similares, a fin de conseguir un beneficio físico, psíquico, médico, anímico o material para la persona, ya que al ser originada desde la mente fisica, sus efectos pueden revertir sobre el plano fisico o material, mientras que en el viaje astral, el cuerpo sutil o astral se mantendrá conectado con el cuerpo fisico solo a través de un “cordón de plata” y hasta llegado el momento del regreso al cuerpo fisico o el momento de la muerte.
Desde el punto de vista de la parapsicologia, el viaje astral es considerado como el camino que nos posibilita conectar la vida física con el más allá, pero que sin embargo, no podrá interferir en los aspectos de la vida fisica, al no posibilitarnos adquirir los conocimientos que pudiesen existir en el plano astral de forma consciente, es decir, con la intervención del cuerpo mental, de ahí que sea a través de la proyección mental como se obtengan los recursos adecuados a nuestras necesidades. Desde el punto de vista esotérico, el viaje astral o desdoblamiento astral, puede ser interpretado como una bilocación y adquiere un concepto totalmente místico y espiritual, donde el fenómeno es utilizado con fines altruistas o de elevación espiritual, ya que en este caso, el desdoblamiento o bilocación, consistiría en la facultad de proyectarse fuera del cuerpo, pudiendo estar en dos lugares a la vez y en un mismo espacio de tiempo. Tal es el caso de muchos místicos religiosos, donde a través de la historia, podemos comprobar como han proyectado su cuerpo en dos lugares a la vez, llegando incluso a ser visualizados fisicamente. Uno de los casos mejor documentados es el de Santa Agueda, quien podía proyectar su cuerpo desde el convento este respecto, tendríamos que referirnos a las descripciones realizadas por los parapsicólogos e investigadores cientificos del tema, por un lado, y a las descripciones realizadas por los entendidos esoteristas, del otro, ya que mientras los primeros intentan descubrir el mecanismo físico y psíquico que lo produce, desde el punto de vista esotérico adquiere una dimensión de tipo espiritual.
Así desde el punto de vista científico, existen infinidad de investigadores que ya desde el siglo XIX, han dedicado sus estudios y esfuerzos en conseguir descubrir una metodología que explicase y demostrase el fenómeno del viaje astral, llegándose a una definición generalmente aceptada y que vendría a ser una descripción similar a la siguiente :
“ El Viaje Astral, se produce cuando el cuerpo astral o sutil, se separa del cuerpo fïsico, sin que para ello sea necesaria una intervención del cuerpo emotivo ni mediación del cuerpo mental, si bien el estado mental se hace necesario para su interpretación”.
No obstante, no es necesario llegar a un estado de muerte clinica o pre-muerte para poder experimentar un viaje astral, de hecho el viaje astral se produce de forma natural en todos y cada uno de nosotros durante el sueño, aunque en este caso se produce de forma inconsciente.
En primer lugar, cuando realizamos un viaje astral de forma consciente, es decir, fuera del sueño, lo que se experimenta es la separación del cuerpo astral, dejando al cuerpo físico totalmente inerte, con apenas una ligera percepción de las constantes vitales, aunque su estado pueda confundirse con el del profundo sueño.
Durante el viaje astral, podrán darse diferentes condiciones que pueden ser interpretadas de acuerdo a la conciencia del individuo, es decir, podrá realizar un tipo determinado de concentración, el cual resultará necesario, aunque nunca sea imprescindible. También será posible mantener la conciencia de lo que ocurra alrededor del cuerpo fisico, aunque de igual manera que lo anteriormente mencionado, no es imprescindible que así ocurra.
Cuando se produce la separación de los cuerpos astrales y físico, la sensación percibida podrá variar de unos a otros individuos, si bien existen determinados tipos de sensaciones que invariablemente se producen.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario